“Será un espacio de cuidado, contención y encuentro”, dijo Castillo

Castillo explicó que el Polideportivo “se va a llamar La Casa del Deporte de Ushuaia. Tiene una mirada de casa, de acompañamiento. Es el lugar en el que crecerán en la actividad deportiva”.

“Venimos en la recta final. Falta poco para que los niños jóvenes tengan una nueva infraestructura para llevar adelante las escuelas deportivas, instituciones, escuelas, clubes y demás”, continuó.

Asimismo, indicó que “las federaciones, los clubes y las escuelas deportivas son las más condicionadas con la posibilidad de contar con canchas. En Ushuaia hay mucha gente sin cancha y en algunas disciplinas se hace difícil”.

Sobre las características del edificio, la Ministra precisó que “este gimnasio tiene la bondad de permitir llevar adelante distintas actividades en el momento. Mientras se ocupa la cancha, en los salones habrá gente con gimnasia artística, entrenamiento, deportes de contacto y demás. Esa es la diferencia con los gimnasios tradicionales, en los que sólo se puede hacer una cosa”.

“Pensamos en un espacio en el que la familia pueda venir y acompañar. Los vestuarios y las duchas están adaptadas para personas con discapacidad o movilidad reducida”.

Además, destacó que “hay una parte alimentaria que tiene un bufete y una merienda saludable. Es otro perfil respecto a cómo hacer crecer la infraestructura deportiva, como un espacio de apoyo pensado para las familias”.

Al mismo tiempo, Castillo aseguró que buscan “generar ese espacio como un lugar integrado de deporte. La idea es diseñar los distintos eslabones como para conformar un complejo deportivo. Además, que nos permita pensar en la competencia, como para que venga gente de afuera, pensar en lo cotidiano y recreativo. Todos tienen que tener la opción de sumar en su día a día la posibilidad de hacer deporte”.

Consultada por los costos y el financiamiento, Castillo señaló que “es una obra financiada por el Gobierno Nacional, con el esfuerzo compartido de la provincia que adelanta fondos para garantizar que la obra tenga la marcha que debe tener”.

“Estamos en un reconocimiento de más de un 100% al año. Las de 2018 tienen un x4 o x5 del valor original. Es muy difícil sostenerlas. Por eso tener el plan de obras activo y buscar soluciones es una parte muy importante”, agregó.

Por otro lado, Castillo aseguró que durante la temporada invernal se sigue trabajando, con menor marcha, pero son tareas que se realizan en el lugar. Son obras que no se paralizan, sino que bajan la marcha. Estamos al final del puesto policial de Almanza, en los detalles y retoques para habilitarlo. Cada uno de los frentes se ha adecuado para continuar con lo que se pueda y parar con lo que no pueda seguir, como el movimiento de suelo”.

Lo mismo ocurre “en Tolhuin, donde detenemos el avance del CDI, estaríamos neutralizando las obras de agua, cloaca y plantas de tratamiento. En Río Grande continuarán el Gimnasio de Garibaldi, el Centro de Desarrollo Infantil y demás. Más allá de adecuar el plan de trabajo por la temperatura, hay muchas obras que van a seguir adelante. Es una prioridad pensar en terminar una obra y sostener el trabajo de forma continua, para los compañeros de la construcción”.

“Aprovechamos el espacio de corte para la provisión de materiales y demás, como para que esté todo listo al reanudar el trabajo. Es algo que tomamos en cuenta para no tener dificultades”, cerró.