“Necesitamos un Estado, una moneda y un Banco Central fuerte”

González consideró que “necesitamos tener leyes productivas, activas, y sistemas que sean referenciados para todas las pequeñas y medianas empresas. No podemos tener las mismas condiciones que las grandes empresas. Necesitamos un diferencial”.

En esta línea, entendió que “el Gobierno debe dar previsibilidad desde un sistema económico que genere certeza y confianza. Las pymes manejamos gran parte de la economía, pero no somos quienes controlan el precio base”.

“Todo el arco político argentino tiene una deuda enorme con el sector productivo. Deberían tener la grandeza para llevar adelante el diálogo y el consenso que se necesita”.

Asimismo, consideró que “más allá de las condiciones económicas y financieras, lo fundamental es la confianza. Japón tiene más deuda que Argentina, pero no para de producir. Entonces, el sistema político debe generar confianza. Esta labor es la que está fallando”.

González reconoció que la inflación “es incómoda, difícil, la macroeconomía nos castiga en doble vía. La resiliencia del empresario pyme argentino que invierte en cada pueblo, es siempre fuerte. Nosotros acompañamos con acciones de negocio en cada ciudad”.

A lo que agregó que, desde CAME, hacen saber su “disconformidad frente a medidas que no son productivas para las pequeñas y medianas empresas. Somos entidades intermedias, somos apartidarios, aunque hacemos política gremial y productiva, orientada al sector productivo”.

Consultado por los proyectos de dolarización, el Presidente de CAME indicó que desde la Confederación creen “que necesitamos una moneda fuerte como en cualquier país. En Paraguay, el empresario te recibe guaraníes, en Brasil te piden el real. Se debe fortalecer nuestra moneda y se debe debatir la Ley de Entidades Financieras, para que se destinen mucho más al sector productivo que al financiero. No los desmerecemos, porque trabajamos con ellos en capacitaciones de forma permanente”.

Respecto a la suba constante de precios, expuso que “el precio base se genera en no más de 24 o 25 empresas argentinas, que son menos del 1%. Nosotros somos más del 99%, pero nos consideran ‘chiquitaje’. La labor del Estado es darles previsibilidad financiera a las grandes empresas, para que sigan produciendo y generen certidumbre, para que baje a la microeconomía argentina”.

“Nosotros somos tomadores de lista de precios, porque no formamos el precio base. No tenemos certezas de precios base y no tenemos certeza de a cuánto se repondrá el producto. Eso es muy dañino en la economía de las pymes y micro”.

González apuntó contra el sector político y manifestó que “en algún momento tiene que haber algún trabajo en conjunto, más allá de las diferencias que puede haber. Se debe avanzar sobre la coincidencia y trabajar en las diferencias. Hay que prestar los debates donde se tienen que dar”.

“La desconfianza es generada por estas condiciones macroeconómicas ¿Cómo van a confiar en nosotros si los que tomamos deuda no podemos pagarla?, ¿cómo explicamos que tenemos la plata y aun así no podemos pagar? Esta es la labor de la política, ellos deben solucionarla”.

“Esperamos que los políticos tengan los pantalones largos para resolver estas situaciones. Es tiempo de que hagan esto. Deben tener la adultez y la humildad de llevar adelante esto. Es labor de quienes están en el Ejecutivo, pero también es responsabilidad de quienes ejercen la oposición. Las entidades intermedias somos apartidarias, pero no somos apolíticas”, subrayó.

En cuanto a las acciones concretas, aseveró que “se tiene que dar el debate por el ordenamiento tributario argentino. Se debe ordenar esto. Lo único que tenemos es que son muchos impuestos, ordenanzas y demás y que la carga es pesada. No tengo idea de qué se tiene que sacar. Tal vez, si lo ordenamos, está bien”.

Además, dijo que “se debe dar el debate fundamental en relación a las leyes laborales, se tienen que actualizar porque son de los 70’. Hay muchas personas que no quieren estar dentro de estas protecciones. Se tienen que actualizar sin pérdida de derechos adquiridos. Las modalidades han cambiado totalmente”.

“La Ley de Teletrabajo es un fiasco, pero por lo menos reconoce un formato laboral que existe. Bueno, demos la discusión. Luego, tenemos que debatir respecto a la digitalización de las pymes y la educación financiera. Es necesario el trabajo con el Estado”, insistió

Para cerrar, entendió que para la región patagónica “hay un punto muy importante que es el de la Ley de Moratoria Impositiva. Hace 5 meses que las tasas se cambiaron y eso cuadruplicó los costos de algo que comenzamos a pagar cuando estuvimos encerrados en pandemia. Esperamos que el Ministro de Economía anuncie que vamos a cambiarlo”.