“La inflación, la incertidumbre y la especulación nos están matando”

El cardiólogo expresó: “Yo pasé la hiperinflación y el 2001, pero a esta situación no la he vivido. El sistema está quebrado. No es sólo OSEF. Así es imposible mantener el sistema solidario, debemos defenderlo con uñas y dientes, porque es el mejor del mundo”.

Según el médico, si no se toman acciones inmediatas “va a pasar como en otros países, que son muy estables, pero la gente no tiene acceso. En nuestros países hermanos, el que tiene plata se atiende y, al que no, se lo tapa con tierra”.

“Toda persona que pise el suelo argentino tiene derecho a la salud y la educación, pero acá a nadie se lo deja de atender. Hoy el sistema está quebrado y, si no hay cambios, se va a romper. Las consecuencias van a ser bastante difíciles de recuperar”, subrayó.

Al mismo tiempo, indicó que “tenemos que intentar no ser Estados Unidos, Chile o Bolivia. El financiador, el prestador, los legisladores, el Ejecutivo, los sindicatos, nos tenemos que sentar en la mesa para ver cómo pasar esta crisis. Hay cosas que tendrán que esperar para atender lo urgente. Estábamos acostumbrados a que el tema se resuelva la semana que viene y hoy tendremos que esperar 6 meses”.

“Yo vivo de las prestaciones médicas y el trabajo en salud. Racionalizar esto va en contra de los intereses económicos de mi negocio. Creo que el sistema de salud está quebrado y estamos en una situación nunca vista”.

También adelantó que implementarán un coseguro para todo el sistema: “Tenemos que hacer un cambio administrativo para ver qué modificaciones tenemos que implementar para aplicar el coseguro a todo el mundo. Las cosas todavía no están preparadas, pero el 15 de noviembre habrá un coseguro para todos”.

“Será de 1500 pesos y se aplicará a todo el sistema, salvo los afiliados de PAMI, porque son los más necesitados. Nunca les cobré y moriré sin cobrarles, porque son los más necesitados”, dijo.

No obstante, aclaró que –aun frente a la aplicación del coseguro- “hay que sentarse para tratar de ver, con el financiador y representantes de las obras sociales y gremios, cómo podemos trabajar. Como el que controla es el prestador, nosotros no tenemos conocimiento de todo lo que pide el médico o todo lo que necesita el paciente”.

“Del otro lado también tienen que sentarse y no decir sólo ‘necesitamos que aumenten los sueldos’. Hay que diseñar algo y si hay que aumentar aportes, deben aumentarse. La gente tiene la posibilidad de hacer un punto o dos más y así solventar el sistema. De esta forma aseguramos que, con parte de sus ingresos, se garantice el acceso a la salud”, opinó.  

“Esto va en contra de mis intereses, pero hay que racionalizar para que demos cobertura a la gente, que es lo que nos importa”.

Sánchez Posleman manifestó que “tenemos que aumentar y racionalizar los recursos, para poder tratar al que tenga un aneurisma cerebral y que el que pueda esperar, que lo haga, hasta que salgamos de esta situación. La crisis que estamos viviendo es inédita”.

Asimismo, sostuvo que “esta es una decisión que hay que tomar entre todos: prestadores, el Gobierno, especialistas sanitaristas y los financiadores. Hay cosas que se piden al vicio y otras que no”.

Respecto a los atrasos constantes de la Obra Social del Estado Fueguino para el pago de los servicios a los prestadores, el titular de la Clínica San Jorge advirtió que “los médicos trabajan a desgano o quieren cortar. Tenemos que prevenir todas estas cosas. Parece que acá sólo reaccionan con el corte de calle. No debemos llegar a eso”.

“Si queremos cambiar el país, no tenemos que cortar la calle para protestar. Tenemos que sentarnos a dialogar. Pero si estoy hablando y hablando y no hay reacción, en algún momento me resignaré y cortaré la calle o el servicio. Es una situación muy compleja”, continuó.

“La gente tiene que tomar consciencia de que cada vez que va al médico es un gasto. Tenemos que concientizar a todos sobre esta problemática”.

Por otro lado, fue consultado por los avances de las obras que llevan adelante y comentó que “ya tenía casi todo el material comprado. Cuando accedí a créditos lo primero que hice fue comprar los materiales. Ahora, de acuerdo al flujo de fondos, va el avance de obra, por la mano de obra. Ahora en 15 días terminaremos con habitaciones nuevas y una sala de endoscopía”.

Finalmente, habló sobre la falta de pediatras y aseveró que “es muy difícil vivir de la consulta pediátrica. Los honorarios son muy bajos y eso desalienta a cualquiera. Por eso la escasez de pediatras en todo el mundo. El sistema, así como está, nos asegura que no vamos a tener pediatras”.

“En medicina interna y pediatría, se cubrió el 40% de las vacantes. Es preocupante, sobre todo en estas especialidades, que requieren mucho sacrificio y estudios. Muchas veces infravaloramos al médico clínico, pero el internista es el que está cuando las papas queman. Son gente que vive de sus conocimientos intelectuales, no de intervenciones quirúrgicas”, cerró.